La comarca se encuentra al sur de la provincia de Córdoba, extendiéndose entre las estribaciones de las sierras Subbéticas al sur y el Valle del Guadalquivir al norte. El GDR Grupo Campiña Sur tiene como territorio de referencia esta comarca integrada por los municipios de:

• Aguilar de la Frontera
• Fernán Núñez
• Montalbán
• Montemayor
• Montilla
• Monturque
• Moriles
• Puente Genil
• La Rambla
• Santaella
• San Sebastián de los Ballesteros
• La Guijarrosa

Estas 12 localidades constituyen un territorio de 1.101 km2 de extensión que albergan una población de más de 104.000 habitantes. Son destacables sus comunicaciones, con la Autovía de Málaga A-45 como eje norte sur, además de las carreteras A-386 que une el territorio con la A-4 en Écija (Sevilla) y la A-318 que une el territorio con la A-92 a través de Estepa (Sevilla). En el ámbito de las infraestructuras cabe destacar la línea férrea Córdoba- Bobadilla, que en la actualidad está prácticamente en desuso aunque contaba con paradas en Montilla, Aguilar de la Frontera y Puente Genil, para las que se está reclamando en la actualidad su reapertura. A esto se une la línea del AVE Córdoba- Málaga que cuenta con una parada en Puente Genil.

Una zona en la que se dibuja un paisaje de orografía suave, más agreste en la fachada sur que se va atenuando conforme se avanza hacia el norte. Su origen geológico se encuentra en el periodo Terciario y a nivel geológico predominan las calizas y las areniscas, aunque también se encuentran presentes características propias de los trías, con arcillas y rocas evaporíticas.

El relieve del territorio no es especialmente elevado, destacando entre sus puntos más altos el Cerro Macho (696 m) en Montilla y Peña Rubia (510 m) en Puente Genil. Esta especial característica del territorio lo convierten en una zona especialmente apta para la agricultura. La vid, con la emblemática Denominación de Origen Montilla-Moriles, y el olivar constituyen sus principales cultivos, aunque cabe destacar la amplia zona regable Genil-Cabra, en la que la producción hortofrutícola tiene un importante peso, especialmente en la producción de ajo.

En la comarca pueden establecerse tres zonas bien diferenciadas: la oriental, conocida como “Campiña Baja”, es olivarera y cerealista, se extiende entre el Guadalquivir y su afluente el Guadajoz; la zona central denominada “Campiña Alta”, a cuyo paisaje se incorporan viñas, discurre entre el Guadajoz y el Genil; al Oeste existe un área geográfica con entidad propia conocida por “Las Colonias” que abarca los pueblos creados en el s. XVII por Carlos III.

El río Genil y su afluente, el río Cabra, son los más destacados de la zona y contribuyen a perfilar el paisaje de este territorio, cuyas aguas alimentan los amplios campos de cultivo de una zona especialmente fértil. Especialmente destacable es el canal Genil-Cabra que permite abastecer de agua a la Zona Regable que tiene esa misma denominación y que abarca una superficie de 23.809 hectáreas

Entre sus recursos naturales, además de los ríos mencionados, destacan las áreas que se encuadran dentro de las Reservas Naturales de las Zonas Húmedas del Sur de Córdoba. Entre ellas se están las lagunas permanentes de Zóñar y Rincón (Aguilar de la Frontera) y la laguna estacional de Tíscar (Puente Genil). Todas ellas declaradas reservas naturales por la Junta de Andalucía. En este apartado también hay que mencionar el embalse de Cordobilla y Malpasillo (Puente Genil) declarado paraje natural y la laguna de Donadío en Santaella.

En La Guijarrosa se encuentra la laguna artificial de La Mohedana, creada tras la extracción de áridos para las obras del AVE. Sus condiciones convierten a estos parajes en lugares de especial interés para los ornitólogos, dada la abundancia de aves entre las que se pueden encontrar calamones, tarros blancos y, especialmente, el malvasía, una especie de anátida única en peligro de extinción.

La historia de este territorio se remonta a la antigüedad, con restos atestiguados de asentamientos desde el Paleolítico, aunque es el periodo romano uno de los primeros momentos de esplendor de la zona como lo demuestran los yacimientos repartidos por todo el territorio y por la referencia a importantes asentamientos, entre los que destacan los hallados en Montemayor (antigua Ulía), las cisternas romanas de Monturque o la villa romana de Fuente Álamo en Puente Genil.

Sin olvidar la necesaria mención a la batalla de Munda. Un hecho histórico ocurrido en el año 45 a.C. durante la Segunda Guerra Civil de la República Romana entre las tropas de Julio César y las de Pompeyo. Una batalla decisiva en la victoria de César y que, según algunos historiadores, pudo tener lugar en Montilla.

El periodo medieval fue otro de los momentos clave en la historia del territorio, del que es fiel reflejo el conjunto de castillos repartidos por sus municipios. Entre ellos los de Aguilar de la Frontera, Montemayor, Montilla, Monturque, La Rambla o Santaella, de los que en la mayoría de los casos solo se han conservado partes de los mismos. En 1453 nace en Montilla Gonzalo Fernández de Córdoba, quien pasará a la historia como el Gran Capitán, perteneciente a la Familia de los Señores de Aguilar, una de las casas nobles más importantes de ese momento.

Durante el periodo de historia Moderna es cuando el territorio adquiere su actual configuración. En este momento es cuando se levantan buena parte de los templos que han llegado a nuestros días, además del asentamiento de importantes órdenes religiosas. También en este periodo se crean alguno de los edificios civiles más importantes entre ellos el palacio ducal de Fernán Núñez (S.XVIII) en estilo neoclásico levantado sobre las ruinas del antiguo castillo destruido por el terremoto de Lisboa de 1755 o la plaza octogonal de Aguilar de la Frontera (s. XIX), junto con decenas de casas solariegas y blasonadas que todavía hoy pueden verse en los municipios. También es destacable la creación en 1768 de San Sebastián de los Ballesteros como colonia dentro del proyecto de repoblación de Carlos III con un total de 300 vecinos alemanes y franceses, con un trazado diseñado por Simón Desnaux, colaborador de Pablo de Olavide.

La comarca atesora, además, un rico patrimonio etnográfico con un calendario festivo que abarca todo el año, entre las que destacan las fiestas patronales y romerías de los distintos municipios, pero también otras fiestas más recientes como las vinculadas a la vendimia. Parte de ese patrimonio es el flamenco, un cante con profunda raigambre en este territorio cuya figura cumbre es Antonio Fernández Díaz “Fosforito”, natural de Puente Genil y una de las cinco Llaves de Oro del Cante.

Sin duda, todo el territorio es conocido internacionalmente por los afamados vinos amparados por la Denominación de Origen Montilla-Moriles, unos caldos generosos que se producen en decenas de bodegas repartidas por todo el territorio en las que se mantiene el sistema tradicional de producción en criaderas y soleras. También la extracción de aceite de oliva virgen ha experimentado un notable crecimiento en las últimas décadas, sin olvidar la importante producción hortofrutícola, que tiene en el ajo su principal exponente.

La artesanía es otro de los grandes referentes del territorio. Sin duda, La Rambla y su producción alfarera es uno de los más conocidos, aunque también se mantienen otras actividades artesanales como la tonelería, muy vinculada al sector vinícola, la madera o la forja.

A lo que hay que añadir el comercio, que se convirtió en uno de los principales sectores económicos de la comarca tras la crisis del sector de la construcción durante la última década que tiene exponentes tan significativos como los centros comerciales abiertos de Puente Genil y Montilla.